El entorno tecnológico actual brinda a las compañías nuevas oportunidades en la manera de implementar el trabajo de sus equipos, asegurando la misma eficacia y eficiencia que las modalidades tradicionales.
Ante un cambio inminente de paradigma en la forma en que se lleva a cabo el trabajo en muchas compañías, el uso de la tecnología se presenta como el vehículo clave para que las empresas desarrollen sus negocios y brinden sus servicios en un nuevo contexto mundial y en el marco de nuevas -y cada vez más frecuentes- prácticas profesionales.
Nos encontramos en una era en donde todo proceso se ve atravesado, al menos en uno de sus puntos, por el Internet. No sólo en el ámbito de las comunicaciones también en el comercio, la educación, la logística, la producción y hasta el manejo de vehículos. El trabajo, es decir, uno de los procesos más humanos de todos, no se ve exento de esta situación. La red hoy todo lo controla, y muchos paradigmas se ven en jaque ante un inminente cambio en las culturas organizacionales y del trabajo de las compañías. Hoy la tecnología plantea un escenario donde las compañías pueden optimizar su producción, agilizar procesos y hacer mejor uso de los recursos disponibles. Lo disruptivo está en marcha y es menester adaptarse para sobrevivir: y la tecnología es la aliada necesaria para ello.
El teletrabajo es una de las modalidades que más fuerza están cobrando y que las compañías implementan cada vez con mayor frecuencia, impulsándolas en algunos casos como un beneficio para los empleados; en otros, ante una necesidad. Al trabajar de forma remota, las empresas deben brindar herramientas de colaboración dinámicas a sus empleados, permitiéndoles desempeñarse de la misma manera que si estuvieran en la oficina, con todos los recursos allí presentes. Lumen es una de las compañías que preparan el terreno para que otras empresas puedan implementar estos nuevos esquemas de trabajo, gracias a una infraestructura de red capaz de atender en el menor tiempo posible la demanda de tráfico necesaria para operar sin inconvenientes. A su vez, implementa sistemas que monitorean y registran los incrementos inusuales en el tráfico mundial de Internet, actuando de manera automática mediante una combinación de tecnologías inteligentes y experiencia humana, para mitigar los riesgos y procurando a los clientes la continuidad del servicio en óptimas condiciones.
Estas necesidades y retos llevó a las empresas de tecnología a emprender proyectos, llevando al mercado regional a tener un crecimiento importante sobre el mundo digital que hoy marca la diferencia en la ampliación de las conexiones, la digitalización de los procesos corporativos y el uso de herramientas tecnológicas para la realización de conferencias de audio y video, entre otros. En este sentido, CenturyLink desarrolla espacios de teletrabajo mediante la implementación de servicios de llamadas y videoconferencias, a la vez que ofrece soluciones que permiten a los empleados acceder de manera efectiva a sus datos críticos y aplicaciones de forma remota. Los clientes pueden escalar conexiones privadas a pedido entre sus data centers, las distintas ubicaciones donde la gente se encuentre trabajando y la nube para satisfacer las distintas necesidades y cargas de trabajo.
Frente a la demanda creciente de las compañías, las empresas de tecnología como Lumen son partners estratégicos y necesarios para dar respuesta a las necesidades de corto y largo plazo. El escenario actual exige esforzarnos cada vez más para resguardar la seguridad de los clientes, minimizando las interrupciones en el servicio y garantizando el flujo continuo del tráfico de datos.
Autor:
Andrew Dugan
Chief Technology Officer de Lumen