La definición de Data Center, si bien tiene una perspectiva tecnológica que ha venido cambiando y volviéndose más compleja en el tiempo, es más valiosa desde el ámbito del impacto que tiene en el negocio. El Data Center es, de manera simplificada, donde se concentran los datos que se recolectan de las operaciones de la empresa, de sus socios tecnológicos y de sus clientes; donde posteriormente son procesados para facilitar la toma de decisiones.
Esta dinámica que hace unos años era vista como soporte a las empresas, en la actualidad, por la transformación digital de los negocios, se ha vuelto crucial no solo para el crecimiento, sino para la supervivencia de la industria. Por ende, al interior de éstas, empiezan a cuestionarse qué condiciones debe brindar un servicio de Data Center para el desarrollo de las actividades del negocio.
Juan José Calderón, Gerente de Data Center y Seguridad de Lumen Perú, señala cuáles son los criterios que los servicios de Data Center deben cumplir para ayudar a las empresas en este nuevo entorno:
- Operar de acuerdo a estándares mundiales. Entre estos estándares se contemplan
aspectos como calidad de servicio, seguridad de la información y de la infraestructura. - Facilitar a las empresas el consumo cercano de tecnología. Mediante la provisión de servicios en modalidad de pago por uso (cloud) con infraestructuras alojadas en diferentes países. Lo ideal es contar con un socio estratégico que ofrezca soluciones para consumo en modalidad de nube para Procesamiento, Almacenamiento de información, Telefonía (Cloud PBX), Videoconferencia, Distribución de Contenido (CDN), Contact Center, Seguridad, entre otros.
- Fomentar en las empresas el consumo de servicios de otros proveedores. Contar con una red de partners que permitan brindar soluciones a las demandas de negocio de múltiples industrias, así como conectarse de manera directa y eficiente a los principales proveedores de nube.
- Contar con especialistas en múltiples tecnologías, más aún en este nuevo entorno donde la adopción y reemplazo de tecnologías se hace a un ritmo cada vez más acelerado. También es bueno complementarlo con especialistas de escenarios de desastre.
En el ecosistema actual de los negocios, donde la tecnología juega un papel preponderante, el no tener disponibles los servicios de IT equivale a que la empresa no esté en capacidad de producir o atender a sus clientes. Y esto hoy no solo genera pérdidas económicas, sino que tiene un impacto directo en la reputación de la empresa y genera dudas sobre su posibilidad de operar, pudiendo derivar en la quiebra de la misma.
Este escenario, si bien puede a primera vista sonar extremo, es más bien una realidad que se puede comprobar diariamente a nivel global vía los medios de comunicación. El que una compañía no tenga clara cuál es su estrategia de adopción de tecnologías, y dónde las va a alojar a fin de asegurar el consumo de estas por parte de sus Stakeholders es, en la actualidad, un boleto asegurado hacia la extinción de la empresa.